Tratamiento de Residuos, Calidad del Agua y Salud
Waste Management, Water Quality and Health
Presentación: Mauricio Sánchez
Tratamiento de residuos, calidad del agua y salud es el tema de la serie Diálogos del Agua que nos ocupa el día de hoy.
Cuatro panelistas integrarán la mesa de discusión: los funcionarios Jorge Montes Garza, con cinco años de experiencia a cargo del área de Comunicación Social y Cultura del Agua del SAPASMA, así como Denia Guadalupe González Barrios, Directora de Calidad del Agua de SAPASMA y con una larga trayectoria en la industria de los alimentos. Ambos representan al Presidente del Consejo Directivo de Sapasma, Lic. José Ulises Valenzuela.
Desde l992, el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de San Miguel de Allende, Sapasma, es la entidad pública descentralizada que se encarga de la explotación, uso y aprovechamiento de las aguas superficiales como del subsuelo y residuales, desde su extracción hasta su distribución, tratamiento y disposición final. Su Visión es “garantizar los servicios de agua con calidad y eficiencia para conservar la salud y bienestar de los usuarios.”
Asimismo, nos acompaña el ingeniero José Abraham Soto, Director de Fomento a la Participación Social del Comisión Estatal del Agua de Guanajuato, experto en planeación hidráulica, abastecimiento de agua en bloque y actualmente en la coordinación de las asociaciones COTAS. Es Ingeniero Civil por la Universidad Autónoma de Coahuila, con estudios de Maestría en Ingeniería Hidráulica por la Universidad Nacional Autónoma de México. También se ha desempeñó como auxiliar de proyectos en el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, así como en proyectos de optimización de redes de agua potable, y desde el año 2001 labora en la Comisión Estatal del Agua de Guanajuato.
También nos acompaña el ingeniero Rafael Zárate, Maestro en Ciencias por la Universidad Politécnica de Madrid y actual presidente del Consejo del Centro de Innovación en Tecnología del Agua de Guanajuato. Es socio fundador de la firma “Hidrorenovación de Mexico” y experto en procedimientos de reutilización de agua, por lo que es consultor de aguas residuales para los gobiernos de Querétaro y Guanajuato, además de ser miembro del Comite Directivo del Consejo Internacional de Nanotecnologia.
Ha participado en gran medida en los diferentes proyectos de diseño de plantas de tratamiento de México y España y posee dos patentes para la industria del agua en México.
En esta ocasión nuestro moderador será Enrique Orvañanos Acosta, dedicado a la creación y desarrollo de negocios en el sector privado de México. En 2010 es electo presidente del Club Rotario del Medio Dia, A.C. (“Rotary Midday Club”), implementando varios proyectos sociales, entre los que destacan la recolección a nivel familiar de agua de lluvia en las comunidades más pobres del municipio.
En el 2011 participa en la renovación del Consejo Coordinador Empresarial de San Miguel, A.C. y forma parte de la comisión del rescate de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de San Miguel de Allende. Su interés profesional se enfoca en buscar el aprovechamiento de los recursos existentes, generando nuevos productos, servicios, fórmulas, métodos, procesos, enfoques y modelos de negocios.
Enrique Orvañanos:
Nos hemos reunido aquí tanto el sector privado como las autoridades haciendo posible la comunicación para encontrar soluciones al problema del agua en San Miguel de Allende. La idea es señalar alternativas que son lógicas, factibles y que se pueden llevar a cabo, algunas con más rapidez que otras.
Rafael Zárate:
He trabajado en el diseño de la planta de tratamiento de agua en San Miguel de Allende. Estoy convencido de que tenemos que promover la sustentabilidad de una manera muy responsable. Debemos tomar en cuenta que la cantidad de agua en el planeta es la misma desde que el mundo fue creado. Nosotros lo vemos como algo muy natural, ya que tenemos agua todos los días, así que no le prestamos mayor atención. El problema del agua es básicamente social y económico.
Desde el punto de vista técnico, el agua es 100 por ciento reutilizable por lo que estamos hablando de un recurso no perecedero. Pero no hay que confiar en esto. Contamos con la tecnología para la reutilización de aguas residuales, pero esto se ha hecho con todas las garantías de calidad sólo en las Estaciones Espaciales. El costo es muy elevado: de 90 a 100 pesos por litro.
En nuestras casas pagamos sólo 1 centavo por el agua que recibimos. Estamos hablando de una diferencia abismal, 10 mil veces más por reutilizar el agua y no estamos dispuestos a pagarlo.
Si el sistema operativo del agua aumentara las tarifas 10 mil veces, nos volveríamos locos. De ese tamaño es el problema. Y este es el problema que tendremos en el futuro, 10 mil veces más grande de lo que tenemos ahora.
El agua que estamos acostumbrados a pagar es un recurso muy barato pero no renovable porque no estamos dispuestos a pagar lo que cuesta reutilizarla con una garantía de calidad. En general, el agua es renovable, pero no en las condiciones en que la estamos administrando.
Cuando yo era joven no pensábamos en ir a una tienda y comprar agua embotellada. Eso sucede ahora porque hemos degradado el recurso. Los europeos que han estudiado el agua durante muchos años y que comparten muchos de los recursos (el río Danubio atraviesa 7 países, algunos beben de él , otros descargan drenaje en él) dicen que la Tercera Guerra Mundial va a ser provocada por el agua.
Regionalmente tenemos un conflicto entre Guanajuato y Jalisco. También hay fricciones por el agua de la presa El Cuchillo entre Nuevo León y los EU, con militares involucrados.
Ahora, ¿quién contamina el agua? Nosotros. Por lo tanto, si somos responsables en la creación del problema, tenemos que estar dispuestos a participar en las soluciones. San Miguel de Allende cuenta con una planta de tratamiento de aguas residuales desde el año 2000, (operó hasta 2008). Pero ha sido rebasada. La población ha crecido y la increíble cantidad de desarrollos residenciales que han surgido en San Miguel, todos, compiten por el agua.
Las compañías embotelladoras de agua están vendiendo lo que se supone debemos tener en casa. México es el consumidor número uno en el mundo de agua embotellada. Esto es algo en qué pensar. Un litro de agua embotellada cuesta 10 pesos. El costo del agua potable es de 10 mil pesos por metro cúbico, pero SAPASMA sólo nos cobra 13 pesos.
Necesitamos promover mayor consciencia y un uso sustentable de nuestros recursos hídricos. El agua que contaminamos ahora se la estamos arrebatando a las futuras generaciones. La contaminación seguirá en aumento y nuestras instalaciones para abastecimiento y tratamiento tendrán que crecer al mismo ritmo. No podemos pensar que con la misma cantidad de pozos vamos suministrar el agua que necesitamos. Cada vez tenemos que bombear más profundo donde hay metales pesados que contaminan el agua.
Por otro lado está el crecimiento demográfico. ¿Qué sucede si el suministro de agua no crece al ritmo de la demanda, mismo tiempo que aumenta la contaminación? Estamos hablando de un problema que no podemos ignorar, pretendiendo que las autoridades lo resuelvan todo. No podemos decir que si el agua tiene arsénico y fluoruro no nos afecta porque tenemos el dinero para comprar agua embotellada. Esa no es la solución. Cuando decimos que sí al agua embotellada, estamos agravando el problema.
Desde luego, podemos reutilizar el agua adecuadamente en nuestros hogares. Cuando nos bañamos y esperamos a que salga el agua caliente estamos perdiendo 26 litros, a 10 pesos por litro. Son 260 pesos. Así que la responsabilidad de cuidar el agua es nuestra también.
Concluyo diciendo que SAPASMA tiene que pagar las cuotas a la Comisión Nacional del Agua por la extracción del agua. El agua pertenece a la nación.
Nosotros sólo la manejamos. Tenemos tinacos por todas partes y eso no está bien, porque estamos dando por hecho que el sistema de distribución no funciona y que tenemos que invertir en un tinaco para almacenar agua.
Entonces las agencias de gestión hacen como que proporcionan el agua y el usuario finge que recibe agua. Así es como están las cosas hoy día.
Enrique Orvañanos:
En las zonas rurales la situación es más grave. Las familiar pagan precios muy elevados por el agua que utilizan. Hay una evidente falta de equidad en la distribución del agua al mismo tiempo la reducción del acuífero en nuestra región es crítica .
José Abraham Soto:
En nombre de la Comisión Estatal del Agua me gustaría hacer referencia a los orígenes de esta situación. No quiero llamarlo un problema pues estamos hablando de un sistema con muchos aspectos que tomar en cuenta.
Recuerdo cuando había una gran cantidad de agua en Guanajuato. Gracias a esto hemos tenido un importante crecimiento económico y social.
Especialmente en la agricultura. El crecimiento demográfico no representaba una amenaza para los cuerpos de agua.
A nivel nacional, la disponibilidad de agua per cápita es alrededor de 4 mil metros cúbicos por persona al año. Por supuesto que la distribución geográfica varía, pero este es un promedio. En Guanajuato la disponibilidad de agua per cápita es de unos 775 metros cúbicos al año. Estamos hablando de escasez debido a la muy baja disponibilidad.
Debemos considerar el cambio climático dentro de este sistema desigual. Sabemos que en nuestro estado hay mayor demanda por la sobreexplotación de los acuíferos. Estamos extrayendo 25 por ciento más de lo que se infiltra.
Es información del último censo. Esto significa que la reducción del nivel del acuífero es de 1 a 3 metros por año y esto impacta a muchas áreas, por lo que me gusta llamarle un sistema. Por lo tanto, si bombeamos cada vez más profundo para extraer agua la calidad va a cambiar Y esto tiene consecuencias. No sólo necesitamos un sistema de purificación más sofisticado sino que tendremos que pagar más por el agua. Vemos una serie de causas y efectos …
Estamos conscientes de la competencia local por el agua. San Miguel es parte de la cuenca Lerma-Chapala, junto con otros cinco estados, para el riego agrícola. Esto ha afectado a los ríos que ahora son pequeños arroyos, la mayoría de aguas negras. Para nuestros sistemas de gestión esto implica un mayor esfuerzo en la extracción del agua. Es lo que enfrentamos actualmente. Al mismo tiempo tenemos que observar lo que está pasando en lo alto de las montañas donde la recarga tiene lugar.
No somos una agencia operadora del agua. Somos un eslabón, los promotores o intermediarios, pero no la autoridad. Apoyamos a los usuarios y a los sistemas de gestión de las diferentes localidades mediante programas de calidad del agua. Podemos promover el uso de plantas de tratamiento y el uso de la cloración en algunas comunidades rurales que están totalmente abandonados, incluidas las que llamamos comunidades de nivel medio con 2mil 500 habitantes. No reciben incentivos económicos por parte del gobierno.
Cuando nos referimos al tratamiento de las aguas residuales estamos hablando de las áreas centrales de los municipios. Nos estamos olvidando de las comunidades marginales que carecen de toda infraestructura para el de tratamiento de sus aguas residuales. Es por eso que nuestra imagen es débil.
Una de nuestras responsabilidades es proporcionar este servicio a estas comunidades rurales abandonadas, pero no tenemos los recursos ni los medios para hacerlo.
En general, las comunidades rurales operan y administran sus sistemas de agua y red de alcantarillado. Sin embargo, hemos identificado una falta de sentido de propiedad por parte de los habitantes con respecto a su infraestructura. Les proporcionamos el equipo declorinador y cuando volvamos un año más tarde, ya no está. Esto es un problema. Estamos hablando de una inversión que desaparece.
Una de nuestras prioridades es ponernos en contacto con los usuarios del agua. Necesitamos desarrollar un sentido de propiedad y responsabilidad en las comunidades para que sean operadores efectivos. Estamos promoviendo la cultura del agua, no sólo en los usuarios, sino también en las agencias operadoras. Hay usuarios que son totalmente conscientes de la situación pero no así los administradores que ignoran su responsabilidad. Así que tenemos que enfrentar ambas situaciones.
También tenemos muchos estudios a través de estaciones meteorológicas, medidores de agua y otros dispositivos en distintos sitios que recogen datos. Hacemos el análisis de calidad del agua de los cuerpos superficiales y aguas subterráneas.
Entonces, ¿hacia dónde vamos? Debemos ver el futuro de una manera diferente. Necesitamos más participación ciudadana porque tenemos un problema que no se va a resolver con más tuberías e infraestructura.
Tenemos que crear una cultura del agua, desarrollar un sentido de responsabilidad en los operadores comunitarios porque de lo contrario vamos a seguir en lo mismo de siempre.
Necesitamos diferentes sistemas de colaboración, tenemos que estar en contacto con los usuarios y encontrar soluciones juntos, trabajar de cerca con las agencias operadoras y darles recomendaciones a partir de toda la información que recopilamos. Podemos consolidar las agencias con nuestra experiencia. Sé que el costo de la electricidad es un problema. Las agencias tienen que pagar del 20 al 30 por ciento del costo total, además del mantenimiento, el personal, etcétera.
Hemos recibido del gobernador del estado la orden de trabajar estrechamente con los usuarios para crear conciencia y difundir la información que tenemos. Por supuesto, esto implica garantizar la calidad en el servicio de suministro y uno de los efectos sería la reducción de las enfermedades.
El agua es un tema complicado, pero es hermoso. Tenemos que verlo como un sistema y hacer frente a todos los aspectos de ese sistema, que es muy dinámico. Nuestro trabajo no puede ser estático ni rígido. Si de verdad queremos promover acciones sustentables para beneficiar nuestros recursos hídricos, es necesario contemplar todos los factores: sociales, económicos, ambientales, de lo contrario no podemos hablar de sustentabilidad.
Necesitamos diseñar nueva tecnología y nuevas formas de suministro energético. También necesitamos que todos los interesados participen: la sociedad, el gobierno y todos los usuarios.
Denia González:
Este es todo un tema y una vez que entendamos mejor la relación entre calidad del agua y salud, vamos a saber qué hacer. Uno de nuestros principales objetivos es reducir las enfermedades relacionadas con las aguas residuales. Y hay una gran cantidad de residuos en el agua.
Hay diferentes tipos de calidades en un agua determinada. Yo vengo de la industria de alimentos y en ese tiempo el agua era la más limpia que podía haber. Teníamos controles de altísimo nivel para obtener la mejor agua.
Luego trabajé en el Departamento de Agua y me di cuenta de que hay distintas visiones para manejar esto. Por un lado tenemos el agua para la producción de alimentos con la mayor calidad posible para garantizar nuestra salud. Por otra parte, el agua utilizada se ensucia pero aún así es un agua muy noble. Está contaminada con sustancias que son fáciles de eliminar. Sin embargo, hay otros contaminantes en la industria que tienen otro impacto.
En la fabricación de productos como botellas, por ejemplo, y en la agricultura misma, encontramos contaminantes que son más nocivos. Así es que agua y salud van de la mano y la disponibilidad de un agua de alta calidad es condición indispensable para la vida.
También tenemos el agua contaminada de la lluvia. Ésta recoge de las calles otros tipos de sólidos e hidrocarburos de los automóviles, lodo y demás. También está el agua utilizada para la elaboración de ciertas artesanía donde se utilizan detergentes no biodegradables.
Aquellos lugares que no tienen suficiente agua no crecen. Necesitamos una cierta cantidad para producir ciertas cosas y Jorge va a mencionar algunas. A veces podemos volvernos locos cuando sabemos la cantidad de agua que se necesita para la fabricación de un producto determinado.
Jorge Montes:
Tuvimos una campaña muy interesante donde informamos al público sobre la cantidad de agua necesaria para la fabricación de ciertos productos. Por ejemplo, 1 litro de cerveza necesita de 5 a 25 litros de agua; 1 kilogramo de cemento necesita 25 litros de agua; 1 kilo de acero, de 300 a 600 litros; 1 litro de leche, de 2 a 5 litros de agua.
En el ámbito doméstico, necesitamos entre 20 y 50 litros de agua para la ducha; 20 litros para lavar los platos; para la ropa, entre 50 y 120 litros de agua; un metro cuadrado de un jardín requiere de 70 litros; para lavar el coche son necesarios 90 litros de agua.
En el contexto agrícola, necesitamos 1.100 litros de agua para 1 kilo de forraje; para 1 gramo de trigo, 1.500 litros de agua; para 1 kilo de arroz, 4.500 litros; para 1 kilo de algodón, 10,000 litros de agua. En muchos casos estamos hablando del agua que utilizamos desde el momento en que se siembra la semilla.
Denia González:
El Departamento de Calidad del Agua de SAPASMA ha estado monitoreando los contaminantes que recibimos en la red de alcantarillado municipal. Hacemos un seguimiento de 4 mil puntos de muestreo para analizar lo que se arroja en el sistema de alcantarillado. También vamos a las comunidades y analizamos los niveles de contaminación de sus pozos y sistemas de alcantarillado. Sabemos que cada vez que profundizamos más en los pozos encontramos más contaminantes.
Estamos usando pastillas cloradas para reducir la contaminación en el sistema de alcantarillado. Le damos seguimiento a la planta de tratamiento de aguas residuales que limpia el agua de San Miguel. Muchos de nosotros tiramos sustancias en el drenaje que no deberíamos. Por ejemplo: pintura, ácido muriático para limpiar el inodoro, soda cáustica para limpiar los hornos, aceite de cocina usado. Esa es un área donde todos debemos contribuir.
Antes de lavar mis platos los limpio con servilletas y el aceite usado lo deposito en una botella antes de tirarlo a la basura.
Jorge Montes:
Actualmente estamos trabajando con un grupo de jóvenes conocidos como Jóvenes en movimiento… tienen diferentes centros para recibir el aceite de cocina usado y convertirlo en biodiesel. Así es que en vez de verterlo al drenaje se puede almacenar en una botella de cristal y cuando usted paga su factura de agua en las oficinas de SAPASMA deposita la botella en un contenedor donde lo recogemos.
Enrique Orvañanos:
Estamos agradecidos por el agua de lluvia que cae en este momento y si pudiéramos recolectarla y encausarla esto nos permitiría llenar la Presa Allende. Sin embargo, cuando entra en los arroyos y se lleva toda la basura no hay planta de tratamiento de aguas que sea capaz de limpiar ese tipo de agua. Necesitamos un sistema de captación de agua de lluvia con el fin de minimizar la carga que llega a la planta de tratamiento.
Jorge Montes:
Después de todo lo que se ha dicho tengo poco que agregar. ¿Qué hacemos en SAPASMA? En lo que respecta a comunicación social y la calidad del agua, estamos en contacto con todas las escuelas de primaria y secundaria, universidades también para ofrecer charlas y desarrollar diferentes tipos de talleres y juegos. Llevamos a los niños a la planta de tratamiento para que aprendan acerca de la importancia de no arrojar desechos en el drenaje y baños. También trabajamos con las comunidades.
Recientemente tuvimos una campaña que decía: “Si consumes más, pagas más.” Queremos sensibilizar la población sobre la importancia de la cultura del agua.
Enviamos mensajes a través de los medios de radio, televisión y prensa. En el periódico Atención hemos incluido mensajes para la comunidad extranjera. También tenemos una página web: www.sapasma.org.mx donde se puede pagar la factura en línea. Ahí pueden encontrar una sección para la participación en las redes sociales con mensajes de cultura del agua.
Durante el tiempo que he estado en este departamento he desarrollado proyectos que se encaminan al cuidado sustentabilidad del agua como el programa de recolección de aceite de cocina usado y el programa de recolección de plástico y baterías, uno de los contaminantes más importantes en las fuentes de agua.
El 22 de marzo, el Día Mundial del Agua, tenemos eventos masivos, talleres, concursos, presentaciones musicales, exposiciones fotográficas con el único propósito de conscientizar a la población. Las puertas de SAPASMA están completamente abiertas y estamos a su disposición para lo que necesite.
Pregunta del público:
La mayoría de los lugares en el mundo y supongo que en San Miguel de Allende el 15 por ciento del agua se usa para consumo domestico y el resto es para uso agrícola e industrial. ¿Qué se ha hecho para educar a esos sectores que utilizan tantísima agua? Entiendo que existe una legislación federal que dice que todos los pozos deben medirse. Según entiendo, no todos se miden. ¿Qué se ha hecho para corregir esto si es que no se hace el uso adecuado de los mismos?
Jorge Montes:
El actual Consejo Directivo está promoviendo una mejor relación con los usuarios que pagan puntualmente. Necesitamos el financiamiento para aumentar nuestra infraestructura. Necesitamos mejores herramientas para la gestión del agua. Tenemos usuarios que pagan puntualmente pero hay muchos que se atrasan. No tenemos la infraestructura económica necesaria para trabajar como deberíamos. Así que la actual Junta ha decidido ser muy inflexible con los que no pagan al mismo tiempo que hace una labor de conscientización. Porque una cosa es cuidar el agua que utilizamos y otra es pagar lo que nos corresponde a fin de contar con el servicio, porque la agencia puede cortar el suministro. Con un equipo de monitoreo correcto también podemos detectar el bombeo ilegal que no se está registrando en estos momentos. Esas son acciones concretas.
Pregunta del público:
¿Entonces qué hacemos? Este un problema mundial pero también regional. Yo propongo que nos enrollemos las mangas y nos pongamos a trabajar. Nosotros hemos aceptado la invitación que ustedes han hecho a la ciudadanía para participar activamente, de tal manera que la organización que patrocina estos Diálogos, ciudadanos de a pie, comunes y corrientes, también estamos emprendiendo otras acciones paralelas.
Invitamos a todos los que están aquí presentes a que se unan porque estamos iniciando un programa de muestreo de calidad del agua en el Río Laja para elevar consciencia sobre el uso del agua. Tenemos también el problema del arroyo de las Cachinches y ya iniciamos un estudio para conocer en qué estado se encuentra.
También vamos a iniciar un programa que consiste en visitar puerta a puerta cada barrio y colonia de San Miguel, espero que con el apoyo de SAPASMA, a fin de entregar a cada familia una pequeña encuesta en la que les preguntaremos qué saben sobre el agua en San Miguel. Queremos entregarles una lista de cosas que pueden hacer a nivel doméstico para conservar el agua. Igualmente, les entregaremos un documento donde se les informa a las familias cuál es la situación del agua en San Miguel.
Paralelamente tenemos otro programa para visitar restaurantes y hoteles ¿Por qué hacemos esto si sólo el 15 o el 20 por ciento del agua se consume a nivel doméstico? Para crear consciencia. Esta es la única manera de informar a la población sobre el stress que sufre nuestro recurso. Podemos ayudar a las autoridades para garantizar que todos los usuarios, y los que abusan del agua, especialmente aquellos que se llevan ese 80 por ciento, no la desperdicien. Si un 50 de ese 80 por ciento de agua para uso agrícola está desperdiciado, hay que hacer algo al respecto. ¿Cómo? Jóvenes aquí presentes, enróllense las mangas y pónganse a trabajar. Necesitamos por lo menos 75 voluntarios que nos ayuden a ir de puerta en puerta para hacer este tipo de encuesta y monitoreo. Los esperamos en nuestra Página Web aguavidasanmiguel.org y participen como voluntarios.
Enrique Orvañanos:
Sí, tenemos que ponernos a trabajar. Los funcionarios de gobierno, técnicos, sistemas operativos, la sociedad, si no hacemos algo de inmediato vamos a pagar un precio muy alto por nuestra omisión.
Pregunta del público:
Creo que el problema es tan fácil de resolver como lo es complicado de resolver. Si gastas, pagas; si consumes más, paga más. La ley de la oferta y la demanda dice que cuando hay mucho de algo, se paga muy poco. Si hay escasez, se paga mucho. Así que necesitamos una autoridad que obligue a los usuarios a utilizar lo que él o ella necesita y no más… el problema es que siempre queremos más y más.
Si el tema del agua no lo vemos como un problema político no lo vamos a resolver. Un planteamiento político va de la mano con un programa de educación: “Yo te voy a enseñar a resolver este problema. Yo voy a ser el ejemplo, porque se educa con el ejemplo”. Somos lo que hacemos, no lo que decimos que vamos a hacer. Si doy el ejemplo y aún así no aprenden los usuarios, entonces hago cumplir la ley. Me propongo a educar a los consumidores en un período de seis meses. Si no aprenden, voy a cobrar el costo real del agua reciclada, incluyendo el costo real del consumo energético. Esa es la única manera te tener soluciones reales a problemas reales.
Lo que está pasando aquí es que pasan cinco años, pasan diez o veinte … y nada cambia. Creo que la solución la encontraremos en las pequeñas ciudades como San Miguel. Esta ciudad tiene una solución. Las grandes ciudades no tienen remedio.
Creo que en San Miguel las autoridades municipales no se preocupan por resolver el problema del agua. Me he acercado a la sala del ayuntamiento para ofrecer opciones y no se han abierto. El gobierno anterior y el actual son lo mismo. Me gustaría conocer la opinión de los panelistas sobre el aspecto político de la solución.
Denia González:
Un comentario muy personal es que tenemos que empezar en nuestras casas con nuestros hijos. Nosotros, como funcionarios, somos una minoría y si no contamos con el apoyo y la sensibilización de la población, muy poco podemos hacer. La política no ayuda.
Enrique Orvañanos:
Estoy de acuerdo. Sólo maduramos cuando nos volvemos conscientes. No creo en la autoridad comportándose como un padre que nos debe educar. La fuerza y el conocimiento provienen de diálogos como estos, además de la organización, la participación y la cooperación. Así es como la autoridad reacciona. No podemos pedirle a papi, como lo hemos hecho durante tantos años, que lo siga resolviendo todo. Vamos a hacerlo nosotros mismos y con la participación de la gestión pública.
Pregunta del público:
No hay duda de que todo el mundo aquí quiere hacer algo por San Miguel. Sin embargo, parece que no estamos de acuerdo en cómo hacerlo. Y la manera de coordinarla. Creo que nos hace falta un tipo de reunión donde cada quien contribuye con ideas concretas sobre cómo resolver el problema.
Esta es una ciudad pequeña, pero tenemos una gran cantidad de personas sinceramente interesadas en salvar a San Miguel salvando el Río Laja, a la Presa Allende. Culpamos a los agricultores… pero sin ellos ¿qué vamos a comer? ¿Por qué la agricultura está tan empobrecida? Tenemos que ir a la raíz del problema.
Las soluciones a los problemas de la humanidad están muy cerca de su raíz, que es el propio núcleo familiar. Los niños aprenden de sus padres. Lo que necesitamos es más educación. Los agricultores tienen que hacer un montón de cosas para producir un tomate que sólo cuesta 1 peso. No vemos esta parte del problema. Mi humilde opinión es que necesitamos tener más gente participando, más opiniones para ofrecer soluciones. Y dejar de quejarnos.
¿Qué podemos hacer? No quiero alardear pero he llegado a esta ciudad para construir una aldea ecológica, autosuficiente y sustentable. Lo hice con mis propios recursos para que la gente viera que podemos reciclar el agua, no sólo para el riego de campos de golf, sino para regenerar el suelo también.
Eso es importante. El tratamiento del agua puede convertirse en un gran fertilizante. Y no es un negocio más para las personas que no tienen una vocación, que no se preocupan por la sociedad o por cuidar la vida. Las plantas de tratamiento de agua son como una “infección”. Y el agua que tratan no se puede utilizar en una milpa, sólo en un campo de golf.
Quiero ayudar. Podemos hacer una pequeña reunión en mi aldea ecológica que es muy pequeña y todo aquel que quiera venir visitarla, es bienvenido. Puedocompartir con todos ustedes la información que tengo. Y si estoy equivodada, me gustaría conocer su opinión.
Pregunta del público:
Sabemos que no todas las aguas residuales en San Miguel van a dar a la planta de tratamiento aunque sabemos que es capaz de tratar el 100 por ciento del agua con residuos orgánicos. Es muy bueno controlen los productos químicos, los aceites, sin embargo, nunca vamos a ser capaces de deshacernos de ellos. Siempre va a haber lluvia, drenaje y calles con los productos químicos. Por lo tanto, ¿no necesitamos otro tipo de tratamiento?
¿Necesitamos otro tipo de planta?
Denia González:
Por supuesto, hay otros tipos de tratamientos previos. Pero no creo que nuestra agencia operadora pueda financiar el tratamiento de aguas industriales. Esta planta es biológica. Cuenta con microorganismos y aunque son microscópicos, se comportan igual que nosotros. Comen y necesitan oxígeno. Cuando arrojamos productos químicos en el drenaje los microorganismos se comen la materia orgánica con otros contaminantes; estamos proporcionando alimento en malas condiciones. Podríamos utilizar pre – tratamientos pero son muy caros. Es una de las soluciones. La otra solución es no arrojar en el drenaje lo que no debemos. Eso es menos costoso pero más complejo de hacer. Esas son las dos opciones que tenemos.
Pregunta del público:
¿Qué piensa SAPASMA sobre la reducción del suministro de agua a los usuarios domésticos?
Jorge Montes:
SAPASMA tiene por ahora un servicio sin límite. El departamento comercial estudia diferentes proyectos. Esta semana se inició un programa para reemplazar los micro medidores en cada uno de los hogares, empezando por la zona centro. Sabemos que la mejor manera de controlar el agua es mediante el uso de un medidor. Estamos mejorando esta tecnología.
También estamos dividiendo a San Miguel en sectores para tener macro medidores en los barrios. Ese es otro tipo de seguimiento. Con esta información vamos a saber cuál es el consumo real y nos ayudará a detectar las fugas. En León hay un proyecto que controla el consumo mediante el uso de tarjetas de prepago y tan pronto como se agota el importe, el servicio se suspende. Luego hay que recargar la tarjeta para renovar el suministro de agua nuevamente. SAPASMA ya está estudiando todas estas posibilidades.
Pregunta del público:
Creo que no hay una solución única al problema, pero sin duda puede haber un conjunto de acciones. Crear conciencia es la primera. Pero también hay nuevas tecnologías disponibles. He investigado mucho y sé que hay “nuevas tecnologías” que se utilizaron en el pasado histórico. No hace mucho tiempo me di cuenta de que en algunos países están trabajando con arroyos que antes eran basura líquida y ahora son humedales para limpiar el agua. No sé si eso sería factible en San Miguel de Allende y si se podría aplicar al arroyo de las Cachinches y muchos otros lugares. Aquí sólo hablamos de plantas de tratamiento, pero ¿qué pasa con la agricultura? He estudiado diferentes técnicas para diferentes tipos de cultivos. Mi pregunta es por qué el gobierno no está promoviendo estas técnicas? Y qué estamos haciendo para recolectar el agua de lluvia en San Miguel de Allende?
Denia González:
Sí, hay humedales, técnicas anaeróbicas, pero si usted va a tratar el agua con piscinas de oxigenación sí son métodos de bajo costo en los que no hay que pagar electricidad ni mantenimiento de equipos, pero en San Miguel el metro cuadrado de tierra es muy caro y para hacer un tratamiento de agua de este tipo necesitaríamos hectáreas.
Enrique Orvañanos:
Me gustaría que participara en nuestras reuniones porque toda esta información debe ser compartida. ¿Estamos recolectando el agua de lluvia?
Sí, algo se está haciendo. La última administración hizo algo al respecto y la actual se interesa también.
Pregunta del público:
¿Tienen ustedes un proyecto para crear conciencia en los agricultores sobre los tiraderos de aguas residuales y el uso de un tratamiento separado?
Denia González:
La idea es promover el riego agrícola con agua de otras fuentes, no sólo de los pozos. Si los agricultores reutilizaran el agua, eso sería maravilloso. Es un proyecto bastante ambicioso, pero hasta el momento, la planta de tratamiento sólo vende agua del campo de golf. Hay otros proyectos para utilizar el agua en áreas verdes y proyectos de construcción. Hemos presentado un plan para los ejidatarios que colindan con la planta de tratamiento para que puedan utilizar agua tratada. Tiene una de las mejores calidades en Guanajuato y produce uno de los mayores volúmenes de agua considerando los contaminantes que recibe. Hemos sido reconocidos por el gobierno federal. Estamos recibiendo 60 centavos por metro cúbico como contribución federal. Nuestra planta de tratamiento de agua es parte de ese apoyo federal.
Otro de los proyectos que tenemos es la elaboración de composta. Una planta aeróbica genera muchos lodos que podría llegar a ser un problema, así que estamos elaborando composta para regenerar los suelos.
Abraham Soto:
La calidad del agua para el cultivo de cosechas es un requisito. Si quiero vender aguas residuales a un usuario para el riego de hortalizas, probablemente se nieguen porque la calidad no sería la adecuada. Pero estamos estudiando esa perspectiva. Hay pequeños proyectos aquí y allá para detener el uso de los pozos. En Celaya, El Rincón, en Acámbaro utilizan agua tratada. Pero estamos hablando de cultivos muy específicos pues hay que cumplir con una cierta calidad.
Conclusiones:
Rafael Zárate:
Conozco el trabajo de SAPASMA y es excelente y está registrado en un marco legal. Pero no pueden hacer más de lo que establece la ley. El estándar de México para el arsénico en el agua potable es de 25 ppm. Y la Organización Mundial de la Salud establece que por encima de 10 ppm ya es peligroso.
Tan peligroso que el riesgo de la diabetes 2 se incrementa en 385 por ciento. El problema de salud hoy en día es la diabetes. Y le va a costar al gobierno más dinero que si hubiera invertido en la reducción del estándar y la prestación de los tratamientos para cumplir con el nuevo estándar. Así, aunque tuviéramos una gran administración con grandes soluciones, no resolveríamos el problema. La diabetes en este país ha matado a más gente de la delincuencia organizada. Y el gobierno no va a hacer nada al respecto, porque las normas que tenemos en nuestro país no protegen a los ciudadanos. Como sociedad tenemos que organizarnos porque estamos pagando las consecuencias. Y espero que esta invitación tenga en realidad un buen impacto.
Abraham Soto:
Tenemos que promover un cambio de paradigma. Tenemos que empezar con pequeños proyectos que sean contagiosos. Esa es la única manera de hacer las cosas bien. Espero que todos aquí puedan expresar nuestra preocupación sobre la escasez del agua para ir con los vecinos y promover una mayor consciencia colectiva.
Denia González:
Este no es el final. Debemos comprometernos con la sensibilización sobre el agua. Si somos 50 personas aquí y salimos a difundir nuestra palabra, podemos convertirnos en 100 voces más.
Jorge Montes:
Estoy de acuerdo. Necesitamos generar multiplicadores para el cuidado del agua. Es la única manera de llegar a los tomadores de decisiones. Yo comparto la ideología de SAPASMA y estamos abiertos a escuchar sus propuestas. Estamos aquí para servir a la población.
Enrique Orvañanos:
El problema es nuestro, por lo que la solución debe venir de nosotros también. Resumo todo lo dicho aquí en una palabra: participación ciudadana.
Presentation: Mauricio Sanchez
Waste management, water quality and health is the topic to be addressed by our panel today in the fourth of the Water Dialogue series.
With us are Jorge Montes Garza, head of the Social Communication and Water Culture Department of SAPASMA and Denia Guadalupe González Barrios, Director of the Water Quality Office of SAPASMA, with a wide experience in the food industry, both representing the President of the Board of SAPASMA, José Ulises Valenzuela. Since l992, (SAPASMA) the Potable Water and Sewage System of San Miguel de Allende, is a decentralized public entity in charge of the operation, use and exploitation of surface and underground water, from extraction to distribution, treatment and disposal. Its vision is to “ensure water services with quality and efficiency to preserve the health and welfare of all consumers . ”
Also with us is the engineer José Abraham Soto, Director of the Social Participation Promotion Department of the State Water Commission of Guanajuato, an expert on water planning and water supply, currently coordinating the COTAS associations the state. He is a Civil Engineer from the Universidad Autonoma de Coahuila and has a Master’s degree in Hydraulic Engineering from the National Autonomous University of Mexico. He´s been project assistant at the Mexican Institute of Water Technology. Since 2001 he works with the State Water Commission of Guanajuato (CEAG).
Also joining us is the engineer Rafael Zarate, Master of Science from the Polytechnic University of Madrid and president of the Board of the Centre for Innovation in Water Technology of Guanajuato. He is a founding partner of the firm “Hidrorenovación of Mexico” and expert on water reuse procedures, a wastewater consultant for the governments of Queretaro and Guanajuato, and a member of the Steering Committee of the International Council of Nanotechnology. He has participated widely in designing treatment plants in Mexico and Spain and has two patents for the water industry in Mexico .
On this occasion our moderator will be Enrique Orvañanos Acosta, dedicated to the creation and development of businesses in the private sector of Mexico. In 2010 he was elected president of the Midday Rotary Club, implementing various social projects such as the collection of rainwater in the poorest communities of the municipality.
In 2011 he participated in the renewal of the Business Council of San Miguel and is part of the Chamber of Commerce, Services and Tourism of San Miguel de Allende. His interest focuses on improving existing resources, creating new products, services, formulas, methods, processes and business models.
Enrique Orvañanos:
We have gathered here members of the private sector and authorities making possible the communication we need to find solutions to the water problem. The idea is to find alternatives that are logical, feasible, and that can be carried out, some faster than others.
Rafael Zárate:
I worked in the design of the water treatment plant in San Miguel de Allende. I am convinced that we have to promote sustainability in a very responsible manner. We should bear in mind that the amount of water we have now in the planet is the same as since the world was created. We look at it as something very common because we have it daily, so we don´t pay much attention to it. The problem about water is basically social and economic.
From the technical point of view, water is 100 percent reusable, so we are talking about a non-perishable resource. But we should not trust that word. We have the technology to reuse wastewater but this has been done completely only on the space stations. It´s the only place where it´s reused with all the safeguards. But the cost is extremely expensive: 90 to 100 Mexican pesos per liter. In our homes we pay 1 cent. We are talking about a cost 10 thousand times more to reuse water and we are not willing to pay that much.
If the water management system says that they are going to increase the cost 10 thousand times [ ] we would go crazy. THAT IS THE SIZE OF THE PROBLEM.
And this is the problem we´ll have in the future, 10 thousand times larger than what we have now.
The inexpensive water we are used to is a scarce resource and it´s non-renewable under those conditions. In general, water is renewable, but not under the conditions we use it.
When I was young we didn´t think of going to a store and buying water in a bottle.
But that happens now because we have degraded the resource. The Europeans that have studied water for many years and who share many of the water resources (the Danubio River goes through 7 countries, some drink from it, others discharge into it) say that the Third World War is going to be over water.
Regionally speaking, we are right now going into a conflict between Guanajuato and Jalisco. We also have a fight over water in the Cuchillo Dam between Nuevo León and the USA, with the military involved.
Now, who is contaminating our water? It is we ourselves. So, if we decide to participate in creating the problem, we must be willing to participate in the solutions. San Miguel de Allende has a wastewater treatment plant the year 2000, (actually began functioning in 2008). But it´s way too small right now. The population has grown and driving to San Miguel I just saw the incredible amount of residential developments. They are all competing for water.
The bottled water companies are selling what we are supposed to have at home.
Mexico is the number one consumer of bottled water in the world and this is something we should think about. In order to have this water quality in our homes we wouldn´t be paying a large amount of money. A liter of bottled water costs 10pesos. The cost for drinking water is 10,000 pesos per cubic meter, but SAPASMA is only charging us 13 pesos.
So we need much awareness and a sustainable use of our water resources. The water we are contaminating now we are taking away from future generations. And this contamination will continue to grow and our facilities for supply and cleaning the dirty water will have to grow at the same rate. We can´t hope that with the same amount of wells we´ll get the supply of water we need since each time it´s harder to pump it out, with the wells being so deep and with natural contaminants.
We have demographic growth. What happens if the water rate doesn´t grow at the same time while we also have an increase in contamination? We are talking about a problem we can´t ignore, pretending the authorities are going to solve it. We can´t say that if the water has arsenic and fluoride it´s o.k. because we have the money to buy bottled water. That´s not the solution. When we say yes to bottled water we are making the problem worse.
We certainly could have adequate reuse in our homes. When you bathe and wait for the hot water to come out, you are wasting 26 liters, at 10 pesos each. That’s 260 pesos. So the responsibility is ours also.
I will finish saying that SAPASMA has to pay extraction dues to the Water Commission. The water belongs to the nation. We only manage it. We have water tanks everywhere and it´s very bad because we are taking for granted that the water system is not going to work so we have to invest in a water tank to store water. The management systems pretend that they provide water and the user pretends they receive water. That´s how things are right now.
Enrique Orvañanos:
When you go to the countryside, the situation is worse. They have to pay high prices for the water they use. There is an evident lack of equity in the distribution of water and at the same time the reduction of the aquifer in our region is critical.
José Abraham Soto:
On behalf of the State Water Commission I would like to refer to the history, the origins of this situation. I don´t want to call it a water problem because it is a system with many facets. I remember when there was a lot of water in Guanajuato.
We had [ ]important social and economic growth especially in agriculture. The demographic growth didn´t represent a water crisis.
If we look at it as a pot, at a national level, the availability of water per capita would be around 4 thousand cubic meters per person per year. Of course, the distribution varies, however, it´s an average we are talking about.
In Guanajuato the availability of water per capita is about 775 cubic meters per year. We are talking about a water stress situation because of the very low availability.
We also have to take into account climate change in this unbalanced water system, which is a network made up of different needs. We know that in our state we have a higher demand for water supply, especially when we have the overexploitation of the aquifers. We are extracting 25 percent more than what is being infiltrated into the aquifers. This is the information from the last census. This means the water level reduction averages 1 to 3 meters per year and that has severe consequences in many areas, which is why I like to call it a system.
Therefore, if you pump deeper for the extraction of that water the quality is going to change. And this has another impact. We not only need a chlorinating system but a more sophisticated purification system in order to remove the contamination of our waters. This means we´ll have to pay more for our water…so it´s a series of causes and effects…
We are also aware of the local competition of our waters. San Miguel is part of the Lerma-Chapala Basin, along with five more states, for agricultural use. This has affected the rivers which are now little creeks of water and usually wastewater. That implies a larger cost for the extraction of waters in our management systems.
This is what we are facing now. We also have to be aware of what´s going on in the top of the mountains where the recharge is taking place.
We are not a ruling or operating agency. We are a link, the promoters or middle man with no power to be an authority. The only thing we can do to support our users and the water management systems of the different localities is through water quality programs. We can promote the use of water treatment plants and the use of dechlorinating?? agents (probably chlorinating agents because under 2500 population they are not required to treat the sewage and will need to at least use chlorine to treat the contaminated drinking water) in some rural communities that are totally abandoned, including those that we call middle level communities with 2500 inhabitants. They don´t receive economic incentives from the government.
When we refer to all the clearing and cleaning up, we are only talking about the central areas of the municipalities. We are forgetting the small communities without infrastructure for cleaning their wastewater. That´s why our image is not that great…one of our responsibilities is to provide this service to these abandoned rural communities, but we don´t have the funds or the means to do it.
In general, the rural communities operate and manage their water system and part of the sewage system. But we have identified a lack of sense of ownership on behalf of the dwellers regarding their infrastructure. We provide them with the dechlorinator?? equipment and when we come back a year later, it´s gone. That´s a problem. We are talking about an investment that disappears.
One of our priorities is to contact the water users. We need to develop a sense of ownership and responsibility in the community so they become the operators. We are promoting this water culture not only in the users but also in the operating agencies. There are users that are totally aware of the situation but maybe the managers are totally ignorant of their responsibility. So we have to face both situations.
We also do a lot of surveys: we have weather stations, water meters and many other devices everywhere that collect data. We also do water quality analysis for surface and underground water. So where are we going from here? We must look into the future in a different way.
We need more participation because we have a problem that is not going to be solved by installing pipes everywhere and more infrastructure. We need to raise awareness on water culture, develop a sense of ownership because otherwise we would be promoting the same process we have been doing so far.
We need different systems, we need to get in touch with the final users and find solutions together and get in touch with the water management systems and give them recommendations because of all the information we gather. We can consolidate the agencies supporting them with our experience .I know the cost of electricity is a problem. The agencies have to pay 20 to 30 percent of the total cost, the maintenance, the staff, etcetera. We have just received an order from the state governor saying that we must get in touch with the users to raise awareness and provide information. Of course, this implies raising the quality of the water they receive, which implies more additional effects like reducing diseases.
Water is a complicated topic but it´s a beautiful one. We have to look at it as a system and tackle every aspect of that system, which is very dynamic. Our work can´t be static or rigid. If we really want to promote sustainable actions, a positive impact on our water resources, we need to include all the factors: social, economic, environmental, otherwise we can´t speak of sustainability. We need new designs in our technology and new ways of energy supply. Also, we need the participation of all the stakeholders, society, government and all users.
Denia González:
This is quite a topic and once we understand better the relation between water quality and health, we´ll know what to do in a better way. One of our main targets is to minimize diseases related to wastewater. And there is a lot of waste in our water.
There are different types of qualities in a given water. I come from the food industry and there the required quality was the cleanest water that could be. We had high controls to get the best water. Then I worked in the Water Department and I realized that there are different ways to look at it. On one side, we have the water to be used in the production of foods which needs a greater quality to guarantee our health. On the other hand, as we use that water we are getting it dirty, but it´s still a very noble water. It´s contaminated but the things that contaminate it can be eliminated easily. However, there are other contaminants in the industry that play a different role. In the manufacturing of any product like bottles, for example, and agriculture, we are talking about different contaminants. Those are the strongest ones. Water and health go together and the water availability with high quality is an indispensable condition for life.
We also get contaminated water from the rain. When it falls in our streets it carries other types of solids and hydrocarbon from cars, dirt, etc. Also, the water used for certain crafts carries detergents that are not biodegradable.
Those locations that do not have enough water do not grow. We need a certain amount of water to produce certain things and Jorge will mention a few.
Sometimes we go to crazy when we know how much water is needed to manufacture a given product.
Jorge Montes:
We had a very interesting campaign where we informed the public about the amounts of water needed in the manufacture of certain products.
For example, 1 liter of beer uses 5 to 25 liters of water; 1 kilogram of cement uses 25 liters of water; 1 kilo of steel, 300 to 600 liters; 1 liter of milk, 2 to 5 liters of water.
Within domestic use, we need 20 to 50 liters of water to shower; 20 liters to wash your dishes; for your laundry, 50 to 120 liters of water; to water one square meter of a garden, 70 liters; to wash your car, 90 liters of water.
In agriculture, to produce 1 kilo of fodder, we need 1100 liters of water; for 1 kilo of wheat, we need 1500 liters of water; 1 kilo of rice, 4500 liters; 1 kilo of cotton, 10,000 liters of water. In many cases we are talking about the water we use from the time the seed is planted …
Denia González:
The Department of Water Quality of SAPASMA has been monitoring the contaminants we receive in the municipal sewage system. We monitor 4 thousand sample points where we analyze what´s being dumped into the sewage system.
We also go to the communities and analyze their levels of contamination. We know that every time we go deeper into the wells we find more contaminants. We also use chlorinated pills to reduce contamination in drains. And we monitor the wastewater treatment plant that cleans the water from San Miguel. Many of us dump into the drain things that we shouldn´t. For instance: paint, muriatic acid to clean the toilet, caustic soda to clean the ovens, used cooking oil. That´s an area we should all address. Before I wash all my dishes I clean them with my napkin and I put all the oil together in a special bottle into the trash.
Jorge Montes:
Currently we are working with a group of young people known as Kids in action…they have different centers to receive used kitchen oil to turn it into biodiesel. So instead of dumping it into the drain you can store it in a glass bottle and when you pay your water bill you take that container to the SAPASMA office where there is a container to place the bottle.
Enrique Orvañanos:
We are thankful for the rain water falling at this moment and if we would recover it it would allow us to fill out the Presa Allende. However, when it goes into the creeks it carries all the trash and there is no wastewater treatment plant that is capable of cleaning that type of water. We need to have a different catchment system for rain water in order to minimize the load that goes to the treatment plant.
Jorge Montes:
After all that has been said I have some additional information. What do we do at SAPASMA? Well, with regards to social communication and water quality, we try to get in touch with all the schools, elementary, junior high, universities and we give talks and develop different types of workshops and games. We take the children to the water treatment plant so they learn about the importance of not dumping waste into the toilets…We also work with the communities.
Recently we had a campaign that said: “If you use more water, you pay more money”. We want to raise the water awareness or “water culture”. We send messages through the radio, TV and print media. In the newspaper Atención we have included messages for the foreign community. We also have a web page: www.sapasma.org.mx where you can pay the bill online. You can find a social network participation with water culture messages.
For as long I have been working in this department, I have developed projects that are dedicated to water care and sustainability like the Used Kitchen Oil Recollection Program and the plastic and battery recollection program, one of the most important contaminants in the water sources.
On March 22, the World Water Day we have massive events, workshops, contests, musical presentations, photographic exhibitions with the sole purpose of raising awareness.
The doors of SAPASMA are fully open and we are at your service for whatever you need.
Question from the audience:
Most places in the world and I suppose in San Miguel de Allende 15 percent of the water resource is used for domestic consumption and the rest is for agricultural and industrial us e. What has been done to educate those sectors that use so much water?
I understand there is a federal law that says that all wells should be metered but this is not being done. What has been done to fix this?
Jorge Montes:
The current Board of Directors is promoting a better relationship with those users that pay regularly. We need the funding to increase our infrastructure. We need better tools for water management. We have users that promptly pay their bills but others are way behind. We don´t have the necessary financial infrastructure to work as we should. So the current Board has decided to be very inflexible with those who don´t pay and at the same time is raising awareness. One thing is to care for the water you use and another is to pay the bill promptly in order to get the water you need because the agency can cut the supply. With the correct monitoring equipment we can also detect the illegal pumping that is not being registered right now. Those are concrete actions.
Question from the audience:
So what do we do?
It is a global problem as well as regional. I propose that we roll up our sleeves and get to work. We have accepted your invitation to actively participate as citizens and so the organization sponsoring these Water Dialogues, ordinary people, is also undertaking other parallel actions.
We invite all of you to join us and participate in our water quality sampling program in the Laja River. We are also concerned about the Cachinches stream and we have already started a series of studies to determine the quality of its water.
We also have a program that consists of visiting door to door every neighborhood and colonia of San Miguel, hopefully with the support of SAPASMA, in order to make a small survey asking the families how much they know about the situation of the water in San Miguel. We´ll also give them a list of things they can do in their homes to conserve water, as well as a document with the facts about the real situation of the water in San Miguel .
Likewise, we also plan to visit restaurants and hotels. Why do this if only 15 or 20 percent of the water is consumed in our homes? To create awareness. This is the only way to inform the public about the stress afflicting our resource. We can help the authorities to ensure that all users, especially those consuming 80 percent of the water, are not wasting it. If 50 of that 80 percent of agricultural water is wasted we must do something about it. How? Roll up your sleeves and get to work. We need at least 75 volunteers to help us go door to door to make this type of survey and monitoring. Visit our website www.cuencasanacomunidadsana.org and participate as volunteers.
Enrique Orvañanos:
Yes, we have to put ourselves to work. Government officials, technicians, operating systems, society, if we don´t do something right away, we´ll pay a very high price for our omission.
Question from the audience:
I believe that the problem is as easy to solve as it is complicated to solve. If you spend, you pay, if you consume more, you pay more. And the rule of supply and demand says that when there is a lot of something, you pay very little for it. If there is shortage, you pay a lot. So we need an authority that forces the citizens to use what he or she needs and no more…but the problem is we always want more and more of what we have.
If we don´t see the water issue as a political problem, we are not going to find the solution. A political approach goes hand in hand with an education program: “I´m going to teach you to solve this problem. I´m going to be the example because you educate by setting the example”. We are what we do, not what we say we will do.
But if I set the example and you don´t learn, then I enforce the law. That means I´m going to educate you in a six month period. But if you don´t learn that way, then I´ll charge you the real cost of water when it implies cleaning it from all the trash, which includes the real cost of energy consumption. That is the only way. Then we would have real solutions to real issues.
What is going on here is that five years go by, ten, twenty years go by… and nothing happens. I think that the solution is in small cities like San Miguel. This city has a solution. Large cities are hopeless. I think in San Miguel the municipal authorities are not concerned with solving the water issue. I have approached the municipal city hall to provide them with choices and they have not been open. The previous administration and the current one are the same. I would like to hear the opinion of the panel members on the political aspect of this issue.
Denia González:
A very personal comment. I believe that we must begin in our homes with our children. We as officials are a minority and if we don´t have the support and awareness of the population, very little can be done. Politics cannot help.
Enrique Orvañanos:
I also agree. We are mature when we are aware. I don´t think it´s adequate to have the authority behave like a father educating us. The force and knowledge comes from Dialogues like these, plus organization, participation and cooperation. That´s how the authority reacts. We can´t ask our daddy, as we have done it for so many years, to do everything for us. Let´s do it ourselves and have the participation of the public management system working along with us.
Question from the audience:
There is no doubt that everyone here wants to do something for San Miguel. However, it seems we don´t agree on how to do it. And how to coordinate it. I think we are still missing an adequate gathering with discussions that contribute with ideas on how to solve the problem. It’s a small city but we have a lot of people sincerely concerned about saving San Miguel, saving the Laja River, the Allende Dam. We blame it on the farmers…but what are we going to eat? Why is the agriculture so impoverished? We need to go to the root cause.
The solutions to the problems of humanity are very close to its root which is the family nucleus itself. Children learn from their parents. What we need is more education. The farmers need to do a lot of things to produce a tomato that only costs 1 peso. We don´t see that part of the problem. So my very humble suggestion is that we need to have more people, have more opinions to provide solutions. And stop complaining.
What can we do? I don´t want to brag about this but I came to this town to build an eco village, self sufficient and sustainable. I did it with my own resources so that people could see that we can recycle water, not only to irrigate golf courses, but to regenerate the soil as well. That´s what´s important. Water treatment can become a great fertilizer. And it´s not another business for people that do not have a vocation, don´t care about society or taking care of life. Those water treatment plants are like an infection of contamination. And the water they treat cannot be used in a milpa, only in a golf course.
I want to help. We can do a small gathering because my Eco Village is a very small one but anyone who wants to come and see, is welcome. I can teach you and share with you all the information I have. And if I´m wrong, I would like to hear your opinion.
Question from the audience:
We know that not all the wastewater in San Miguel goes to the water treatment plant even though it could treat 100 percent of the water with organic waste. It´s very good that you are trying to control the chemicals, the oils, however, we’ll never be able to get rid of them all. There´s always going to be rain, street drainage and chemicals. So, don´t we need another type of treatment? Should the plant be different?
Denia González:
Of course, there are other types of pre-treatments. But I don´t think that our agency could afford to clean industrial waters. This plant is a biological plant. It has microorganisms and even though they are microscopic, they behave just like we do. They eat, they need oxygen. When we dump chemicals the organic matter in the water is eaten by the microorganisms and with other contaminants, we are providing food in bad conditions. We could use pre-treatment that are very expensive. It´s one of the solutions. The other solution is not to dump into the drain what we are not supposed to. And that´s less expensive but complex to do. Those are the two options that we have.
Question from the audience:
What does Sapasma think about reducing the water supply to the home users.
Jorge Montes:
Right now Sapasma provides the service without a limit. The commercial area of Sapasma is currently studying different types of projects. This week they began with a program to replace the micro meter in each one of the homes, beginning downtown. We know that the best way to control the amount of water is by using a meter. We are improving this technology. We are also dividing San Miguel in sectors so we have macrometers in the neighborhoods. That´s another type of monitoring. With that information we´ll know the real consumption and will help us detect leaks. In León there is a project that controls the consumption by using prepaid cards and as soon as you have used up the amount, the service is closed down. Then you need to recharge your card to receive the water supply again.
SAPASMA is already studying those possibilities.
Question from the audience:
I think there is no unique solution to the problem but we certainly can put together a set of actions. Creating awareness in the use of water is the first one. But there are also new technologies available and I have made a lot of research and I know there are “new technologies” which were used in the past history. Not long ago I saw that in some countries they are working with creeks that used to be liquid trash and they are changing them into wetlands to clean the water therein. I don´t know if that would be feasible in San Miguel de Allende and applied to the Cachinches creek and many other places. We´re only talking about treatment plants but what about agriculture. I´ve studied different techniques for different types of crops. My question is why the government is not promoting these techniques? And what are we doing to catch rain water in San Miguel de Allende?
Denia González:
Yes, there are wetlands, anaerobic techniques, but if you are going to treat the water with oxygenation pools yes, they are inexpensive methods where you don´t have to pay electricity bills and equipment maintenance, but here, a square meter of land is very expensive and to do a water treatment of this kind we would need hectares.
Enrique Orvañanos:
I would like you to participate in our meetings because all of this information needs to be shared in our gatherings. Is rainwater being caught? Yes, a little is being done. The last administration did something about it and the current one is interested as well.
Question from the audience:
Do you have a project to create awareness in the farmers about the wastewater discharges and the use of separated treatment?
Denia González:
The idea is to promote irrigation with water from another source, not just wells. If farmers could use treated water, that would be wonderful. It´s quite an ambitious project but so far, the water treatment plant sells water only to the golf course.
There are other projects to use that water for green areas and construction. We presented a plan to the ejido owners near the treatment plant so they can use our water. It has one of the best quality levels in Guanajuato and produces one of the largest amounts of water considering the contaminants that it receives. We have been acknowledged by the federal government. We are receiving 60 cents per cubic meter as a federal contribution. Our water treatment plant is part of that federal support.
Another project we have is the production of compost. An aerobic plant generates a lot of sludge that could end up being a problem so we are beginning to make compost to regenerate soils.
Abraham Soto:
The water quality for raising crops is a requirement. If I want to sell wastewater to a well user for vegetable irrigation, they will probably refuse it because the quality would not be adequate. But we are looking into that perspective. There are small projects here and there to stop the use of wells. In Celaya, El Rincón, in Acámbaro, they use treated water. But we´re talking about very specific crops and you need to meet a certain quality.
Conclusions:
Rafael Zárate:
I know the work of SAPASMA is excellent and it´s already written down in a legal framework. But they can´t do more than what the law establishes. Mexico´s standard for arsenic in potable water is 25 ppm. And the World Health Organization establishes that above 10ppm is dangerous. So dangerous that the risk of diabetes 2 is increased by 385 percent.
The health problem today is diabetics. And it´s going to cost the government much more money than if it had invested in reducing the standard and providing the treatments to meet the new standard. So even if we had a great administration with great solutions, they couldn´t solve the problem. Diabetes in this country has killed more people than organized crime. And the government is not going to do anything about it because the standards we have in our country do not protect the citizens.
As a society we need to organize ourselves because we are paying for the consequences. And I hope that the invitation has actually a good impact.
Abraham Soto:
We need to foster a change of paradigm. We have to begin with small projects that are going to be contagious. That’s the only way of doing it right. I hope that everyone here could actually express our awareness of the water scarcity so we can go to our neighbors and raise more awareness.
Denia González:
This is not the end. We must commit to raising awareness. If we are 50 people here today and we go out and spread the word, we could turn it into 100 voices.
Jorge Montes:
I agree. We need to generate multipliers of water care. It´s the only way to reach the decision makers. I share the ideology of SAPASMA and we are open to listen to your proposals. We are here to serve the people.
Enrique Orvañanos:
The problem is ours, so the solution is ours. I summarize all that has been said here in one word: participation.